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El Real Zaragoza vuelve del Moncayo con un punto

Lo lucharon y lo intentaron pero el Real Zaragoza vuelve a pasar la semana fuera de las posiciones de ascenso directo.

Otra semana más a las puertas del Alavés y la cosa se complica, aunque no todo está perdido en la batalla por viajar sin peajes a primera división. Se ha eliminado del calendario una nueva oportunidad después de empatar 2-2 contra el Numancia en un partido movido en el que hubo un poco de todo.

Respecto al partido como tal, hay valoraciones diversas. Hay quien asegura que el Real Zaragoza hizo uno de los mejores partidos de la temporada y otros opinan que se tuvo demasiada piedad con un Numancia que hizo muchos regalos a los jugadores blanquillos, que no supieron aprovechar. Las valoraciones van y vienen pero lo que queda es el punto conseguido. Sumar nunca es malo, pero lo cierto es que el ascenso directo se queda a cinco puntos.

El Real Zaragoza lo tiene que ganar todo

Una vez tachado del calendario el partido frente al Numancia y hechas las cuentas pertinentes, la conclusión no deja resquicio para las valoraciones: los hombres de Lluis Carreras tienen que hacer pleno en los cuatro partidos que restan, mientras que Alavés y Leganés no pueden sumar más de siete puntos para mantener viva la esperanza de ascender de forma directa. Si estos dos equipos, que pese al acoso continuo sigue siendo los dueños de las dos primeras plazas, obtienen más de siete puntos, muchos milagros matemáticos se tendrían que dar para que el club aragonés ascienda sin pasar por el playoff. Por cierto, que el playoff parece prácticamente asegurado para el Real Zaragoza. En caso de quedar terceros, tendrían el factor campo a su favor.

Las claves del partido frente al Numancia

El duelo contra los vecinos sorianos fue un poco extraño. Una marea humana de zaragocistas invadió Soria pero se llevaron un sabor de boca agridulce. También la directiva del Real Zaragoza se fue de la capital soriana algo enfadada con sus homólogos. Las buenas sensaciones en el terreno del aficionado, no estuvieron acordes a algunas cosas que sucedieron en el campo.

  • Las expulsiones: Dorca vio la tarjeta roja en el minuto 37 y el equipo se quedó huérfano. Una roja más que rigurosa con las imágenes en la mano. También Lluis Carreras acabó expulsado y alborotado. No solo protestó sino que mantuvo un intenso cruce verbal con el árbitro. Esta situación puede acarrear una sanción de hasta cuatro partidos, es decir, lo que queda de liga. «Pido disculpas al Real Zaragoza por mí comportamiento y por el escudo que representó», dijo el técnico en la rueda de prensa posterior.
  • Ángel y Manu Lanzarote: los goles del extremo catalán siguen siendo sinónimo de puntos y el delantero sigue justificando con goles las razones por las que Carreras confía ciegamente en él. De la suerte de piezas como estas depende la suerte del Real Zaragoza.
  • El árbitro y el playoff: tras el partido, el club explotó contra el arbitraje. Entienden que el colegiado no ofreció el nivel necesario para dirigir un partido así y se sienten muy perjudicados por sus decisiones. El propio Christian Lapetra, presidente del Real Zaragoza, fue el encargado de elevar el tono de voz en este sentido.

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