Culio, Hinestroza o Cabrera han señalado sin tapujos la intención del Real Zaragoza de ascender de forma directa. Pero primero hay que recortar puntos y atacar los puestos de promoción, ahora mismo a un punto de distancia.
Segundo asalto a los puestos de promoción. No lo consiguió en su visita a Vitoria, donde el Real Zaragoza solo pudo rascar un empate a cero, que le dejó a las puertas de incrustarse de nuevo en esta zona de la clasificación. Ante el Albacete tiene una nueva oportunidad, aunque tendrá que intentarlo sin dos pulmones de referencia desde el pasado mes de enero: ni Culio ni Javi Ros, que cumplirán sanción. Con el argentino no ha habido clemencia y se ha desestimado el recurso por una de las amarillas que vio frente al Alavés.
Presume el Real Zaragoza de ser ahora mismo un equipo sólido. Poco deberían atreverse a decir lo contrario viendo la trayectoria que ha seguido el equipo aragonés en las últimas semanas. Gracias a esta nueva senda, que viene a corregir la irregularidad que se vivía hace meses, el equipo blanquillo ha remontado posiciones y se encuentra a tan solo un punto del sexto clasificado. Los puestos de promoción están al alcance de la mano, pero no así los de ascenso directo, alejados todavía en siete puntos.
A pesar de que alcanzar al Leganés y al Alavés es todavía una tarea difícil, dentro del vestuario piensan que todavía es un objetivo realizable: “el objetivo es ascender y lo antes posible, como segundos o primeros, pero para eso no tenemos margen de error”, ha comentado Leandro Cabrera esta semana. No obstante, el central uruguayo no ha desviado la atención sobre lo prioritario: no se debe caer en la relajación justo cuando están a punto de volver a la pelea importante. «Tenemos que sumar de tres en tres, y sobre todo en casa. Queremos empezar a recortar diferencias”, ha matizado en su rueda de prensa correspondiente.
Hinestroza también quiere ascender con el Real Zaragoza
Por lo que se ha visto, y sobre todo escuchado, esta semana, todo parece indicar que el ascenso directo es una conjura dentro del vestuario. Otro que ha señalado la prohibición de relajarse ha sido Hinestroza: «No cabe la relajación, tenemos que mantener el nivel”. El colombiano, cuya propiedad tendrá que comprar el Real Zaragoza si llega a 30 partidos, no ha ocultado sus ganas de jugar en primera división con el equipo blanquillo: «tengo la ilusión de jugar en Primera División con este equipo». La intención está clara, ahora solo hay que llevar a cabo el deseado ascenso.
Pero antes de aterrizar en primera división toca verse las caras con el Albacete. La buena noticia es que los manchegos se presentan en La Romareda como un equipo teóricamente asequible. Alojado en los puestos de descenso –a cuatro puntos de la salvación- este equipo plagado de jugadores con pasado zaragocista solo ha conseguido arrancar dos empates en sus últimos cinco duelos. Encadena dos derrotas consecutivas (Almería y Leganés) y apenas ha conseguido seis puntos en los 13 partidos que ha jugado lejos de su estadio. Las apuestas dicen que solo hay un favorito –el Real Zaragoza- pero ya sabemos lo que dicta la historia: hay que demostrarlo en el campo.