Más de uno no lo tendrá en cuenta, pero es necesario señalar que el Real Zaragoza juega el lunes. A buen seguro que alguno lo tenía todo preparado para el domingo, pero no. El fútbol no entiende de puentes festivos, pero en el caso del Real Zaragoza nos hacen esperar. Y habrá que esperar para disfrutar, esperemos que este sea el verbo correcto, de un partido inédito. Nunca en la historia se han visto las caras el Bilbao Athletic y el conjunto blanquillo.
Pero siempre hay una primera vez para todo. Y estar en segunda división tiene estas cosas, hay que enfrentarse a los filiales. Un partido con más tensión de la que se palpa en el ambiente. La victoria frente a la Ponferradina ha aliviado los agobios que había en la semana previa al mismo, pero no ha eliminado del todo las malas sensaciones que se habían instalado en el seno zaragocista. No olvidemos que muchos hablaban de ultimátum a Ranko Popovic hace poco más de una semana.
Sí que es cierto que con tres puntos todo sabe mejor. Y también es cierto que el Real Zaragoza alcanzó un buen nivel de juego y terminó rematando con victoria. Pero tanto las sensaciones como la recuperación del equipo tienen que confirmarse ante el Bilbao Athletic, un partido de esos que no se pueden perder.
Popovic lo sabe, y quizá por eso ha encerrado al equipo la última semana de entrenamientos. Por norma general, siempre ordena un par de entrenamientos a puerta cerrada. Pero ante la importancia de ganar a los bilbaínos se decidió que nadie pudiera poner los ojos en la plantilla en ningún entrenamiento. Veremos si funciona el truco.
Pedro, in crescendo
Lo ha reconocido en una entrevista en el diario Marca: tras superar una lesión de importancia no se puede pasar “de cero a cien” en cuatro días. Son palabras de Pedro, que ante la Ponferradina volvió a ofrecer su mejor versión, e incluso volvió a marcar un gol. Todavía le queda recorrido, como es lógico, pero gran parte del fútbol que debe generar el Real Zaragoza tiene que pasar por sus botas. Y más teniendo en cuenta factores como la lesión de Diamanka, que no volverá a vestirse de corto hasta enero.
Jugadores como él son argumento suficiente como para otorgar cierto favoritismo al Real Zaragoza para el próximo partido. En segunda división no es fácil ganar ningún partido, pero menos hacerlo fuera de casa. No obstante, siendo realistas, seguro que el partido frente al Bilbao Athletic está marcado como “obligatorio ganar”. El equipo de Ziganda vive instalado en los últimos puestos de la clasificación pero, tal y como han recordado varios zaragocistas, en su feudo están más fuerte de lo que parece. De hecho, de los 13 puntos que figuran en su casillero, doce los han obtenido jugando como locales. Lejos de San Mames, todavía no conocen la victoria. Dato muy a tener en cuenta a la hora de gestionar apuestas deportivas.
